Judith Kerr es una escritora e ilustradora, nacida en Berlín en 1923, en una familia judía.
En 1933 abandonó Alemania huyendo de los nazis.
Su familia se trasladó primero a Suiza, luego a Francia y finalmente a Inglaterra donde ha vivido desde entonces.
Realizó en este país sus estudios de Arte y es ciudadana británica nacionalizada.
Trabajó como pintora, diseñadora y guionista de la BBC antes de empezar su carrera como escritora.
Ganó en 1974 el premio Deutscher Jugendliteraturpreis con Cuando Hitler robó el conejo rosacon el que intenta explicar a sus hijos sus experiencias de la Alemania nazi.
Es conocida, sobre todo, por sus libros para niños que ilustra ella misma, como la serie de Mog, la gata despistada.
Primeros dibujos de la familia de Mog en una fotografía de Kerr-Kneale Productions Ltd 2013
Judith Kerr se inspiró para los relatos y dibujos de su serie sobre Mog en su propia familia: la propia Judith Kerr, su marido Tom Kneale y sus hijos Tacy y Matthew.
Para la despistada gata Mog protagonista de sus libros se basó en una gata que ellos mismos tenían llamada Mog.
La verdadera gata Mog y su plato favorito en una fotografía de Judith Kern
MOG'S, CHRISTMAS CALAMITY
La protagonista es la despistada Mog, una gata que, pese a sus esfuerzos, sólo da quebraderos de cabeza a sus amos.
La familia Thomas cuida y quiere a Mog, pero poco a poco la paciencia de éstos aminora y la única que sigue confiando en la gatita es Debbie, la hija.
Mog entorpece la vida cotidiana de los Thomas sin ser consciente de ello, ya que se mete en medio sin querer o se olvida de cómo se tiene que comportar o dónde están las cosas.
Llegan las navidades y todo parece ir bien, Mog duerme en su cesta...
Pero de repente, una serie de calamidades y desgracias encadenadas hacen que se produzca un incendio en casa de los Thomas.
Afortunadamente los bomberos llegan a tiempo y todos consideran a la gata Mog como la salvadora.
Pese a que la casa ha quedado ahumada y destrozada, la familia Thomas puede celebrar la Navidad con la ayuda de amigos y vecinos.
Los Thomas adoran desde ese momento a Mog, todos creen que merece una medalla y prometen que la tratarán bien y como una heroína.
Todos celebran juntos las Navidades y Mog recibirá como premio su plato favorito: un huevo cocido.
LA GATA MOG EN LA PUBLICIDAD NAVIDEÑA
Una conocida cadena de tiendas del Reino Unido ha decidido utilizar el cuento navideño tituladoMog's Christmas Calamity de Judith Kerr para felicitar las pascuas a sus clientes.
La iniciativa ha tenido un gran éxito de público y el vídeo ha recibido cerca de diecinueve millones de visitas.
En el vídeo se puede ver la colaboración de la propia escritora Judith Kerr en el papel de la anciana que comenta a los niños Thomas que la gata Mog merecería una medalla.
Si quieres ver a Mog, la gata despistada, en este famoso anuncio navideño de 2015, aquí puedes hacerlo:
Los Carmina Burana o Canciones de Benediktbeuernson una colección de 320 poemas que se remonta al siglo XIII, alrededor del año 1230.
Esta extraordinaria colección de poesía medieval fue descubierta en 1803 en el monasterio de Benediktbeuern en Baviera después de que fuera secularizado durante la Revolución Francesa.
Monasterio de Benediktbeuern en Baviera
TEMAS DE LOS CARMINA BURANA
Los Carmina Burana incluyen cuatro categorías básicas de poemas.
MORALIA CARMINA Poemas satíricos o moralizantes.
CARMINA VERIS ET AMORIS Canciones que celebran la primavera y el amor.
CARMINA LUSORUM ET POTATORUM Canciones para el juego y la bebida incluyendo versos goliardescos.
DIVINA CARMINA Poemas con contenido religioso.
EL CODEX BURANUS
Esta colección de poesía lírica se publicó por primera vez en 1847 como el Codex Buranus por el bibliotecario Andreas Schmeller.
El manuscrito del Codex Buranus consta de 112 hojas de vitela con unas medidas de 25x17cm, con ilustraciones y las letras capitales en colores.
Por su calidad se cree que fue destinado a una personalidad influyente y posiblemente perteneció la corte del obispo de Seckau (1231-1243).
Hoy en día, el manuscrito original se encuentra en la Biblioteca Estatal de Baviera en Munich.
Los poemas individuales se identifican como CB seguido por un número.
TEMPUS EST IOCUNDUM, CODEX BURANUS 179
Aquí puedes escuchar una de las composiciones dedicadas al amor y a la primavera titulada Tempus est iocundum del Codex Buranus 179.
TEMPUS EST IOCUNDUM
Tempus est iocundum, o virgines! modo congaudete, vos iuvenes!
O! o! totus floreo! Iam amore virginali totus ardeo; Novus, novus amor est, quo pereo!
Cantat philomena sic dulciter, et modulans auditur; intus caleo.
O! o! totus floreo! Iam amore virginali totus ardeo; Novus, novus amor est, quo pereo!
Flos est puellarum, quam diligo, et rosa rosarum quam sepe video. O! o! totus floreo! Iam amore virginali totus ardeo; Novus, novus amor est, quo pereo!
Mea me confortat promissio, mea me deportat negatio.
O! o! totus floreo! Iam amore virginali totus ardeo; Novus, novus amor est, quo pereo!
Mea mecum ludit virginitas, mea me detrudit simplicitas.
O! o! totus floreo! Iam amore virginali totus ardeo; Novus, novus amor est, quo pereo!
Sile, philomena, pro tempore! surge, cantinela, de pectore! O! o! totus floreo! Iam amore virginali totus ardeo; novus, novus amor est, quo pereo!
Tempore brumali vir patiens, animo vernali lasciviens.
O! o! totus floreo! Iam amore virginali totus ardeo; Novus, novus amor est, quo pereo!
Veni domicella, cum gaudio! veni, veni, pulchra! iam pereo!
O! o! totus floreo! Iam amore virginali totus ardeo; Novus, novus amor est, quo pereo! Novus, novus amor est, quo pereo!
LAS MINIATURAS DEL CODEX BURANUS
El Codex Buranus contiene ocho miniaturas coloreadas de considerable interés.
La Rueda de la Fortuna manuscrito Carmina Burana, (Biblioteca Estatal de Baviera, Clm 4660 f.1r)
La miniatura de la Rueda de la Fortuna que se inserta al comienzo del manuscrito retrata a Fortuna, la diosa romana del destino, que lleva una corona y un manto de armiño. y está sentada dentro de la rueda de la Fortuna, Alrededor de la rueda se muestran las cuatro etapas del ascenso y caída de un soberano. Al principio se supera la rueda, pero finalmente cae al suelo bajo sus rayos, simbolizando la fugacidad de poder y las vicisitudes del destino.
Escena de primavera, manuscrito Carmina Burana,
(Biblioteca Estatal de Baviera)
Otra de las ilustraciones representa una alegre escena de la primavera con árboles, plantas y flores de diseños muy elaborados y caprichosos. Entre la vegetación vemos animales variados, numerosas aves volando y posadas en los árboles y en la parte inferior de la ilustración, en el suelo se observan otros animales como un ciervo, un león, un caballo o un conejo.
Jugadores y bebedor, manuscrito Carmina Burana,
(Biblioteca Estatal de Baviera)
Otras miniaturas retratan escenas de taberna con juerguistas y bebedores y diversos personajes que juegan partidas a los dados, a juegos de mesa o al ajedrez.
Jugadores de dados, manuscrito Carmina Burana,
(Biblioteca Estatal de Baviera)
Además hay dos ilustraciones correspondientes a pasajes de la Eneida del poeta romano Virgilio. En una de las miniaturas se ve la escena del suicidio de Dido arrojándose a la llamas desde una torre de su palacio al verse abandonada por su amado y en la otra, situada debajo de la anterior, se representa la partida de Eneas que se aleja con sus guerreros en un barco.
Escenas de la Eneida de Virgilio, manuscrito Carmina Burana,
(Biblioteca Estatal de Baviera)
Y en otro de los folios, vemos el dibujo de dos amantes que acostados uno al lado del otro, se ofrecen un ramo de flores como prenda de amor.
Enamorados, manuscrito Carmina Burana,
(Biblioteca Estatal de Baviera)
LA POESÍA DE LOS CARMINA BURANA
Gran parte de la poesía lírica en los Carmina Burana es francamente pagana y sensual en su contenido.
Son cantos goliárdicos de disfrute del amor, la naturaleza y los sentidos, unidos a elogios al amor, al juego o, sobre todo, al vino. Sátiras a los poderosos sean reyes, eclesiáticos o civiles mezcladas con cánticos morales.
Bebedores, manuscrito Carmina Burana,
(Biblioteca Estatal de Baviera)
¿QUÉ SON LOS GOLIARDOS?
Uno de los personajes más curiosos de la Alta Edad Media europea es el del goliardo, una mezcla entre religioso y juglar.
Los denominados clerici vagantes o goliardi pertenecían a los estratos más bajos de la jerarquía eclesiástica y se dedicaban a vagar por los caminos vendiendo su habilidad poética y musical a cambio de limosna.
Los goliardos eran clérigos que buscaban en la poesía juglaresca un medio de vida y, en ocasiones, una forma de pagar sus estudios, que realizaban aquí y allá hasta que en el siglo XIII al organizarse los estudios en las universidades perdieron su razón de ser.
Estos poetas se daban a sí mismos el nombre de goliardos afirmando en tono burlón que pertenecían a la “orden goliárdica”.
Los goliardos veneraban como santo patrón a un tal Obispo Golias, de origen incierto, al que muchos de ellos se refieren en sus obras.
Otros sostienen que la palabra goliardo deriva de gula, dada la glotonería y la afición por el vino que demuestran muchos de estos poetas o del personaje bíblico de Goliat que se asociaba al mal.
LA MÚSICA DE CARMINA BURANA DE CARL ORFF
La colección de poemas medievales Carmina Buranadebe su popularidad actual al compositor alemán Carl Orff, quien escribió su famosa obra del mismo nombre usando los textos originales.
Carmina Burana es una cantata escénica del siglo XX compuesta por Carl Orff entre 1935 y 1936, utilizando como texto veinticuatro de los poemas medievales originales del Codex Buranus.
Las canciones del Codex Buranus representan la colección más grande de textos latinos conservados de la Edad Media.
Aquí puedes escuchar y ver el Carmina Burana de Carl Orff con la puesta en escena de Jean Pierre Ponnelle:
Francisco Corrales Fernández de la Puebla es un escritor, articulista, cuentista, novelista y crítico literario nacido en Arganda del Rey en Madrid en 1966.
Es licenciado en Filología Hispánica, profesor de Enseñanza Secundaria y corredor de maratones.
Sus artículos, críticas y reseñas aparecen en diferentes revistas literarias como Calamar, Hilos de Araña o la Revista del Colegio de doctores y licenciados de la Universidad Complutense.
Ha preparado en Castalia ediciones didácticas de teatro breve de autores como Unamuno, Baroja, Azorín, Álvarez Quintero, Valle-Inclán, Benavente, Arniches, Gómez de la Serna… y dos piezas juveniles de Alonso de Santos.
Es autor de un manual ebook Hagamos teatroque busca servir de guía y estímulo a quienes tienen la aspiración de montar una obra teatral, pero ignoran cómo afrontar las múltiples dificultades del proyecto.
Reside actualmente en Gijón donde es profesor de Lengua Castellana y Literatura.
Ha ganado diferentes premios de cuentos, relatos y de novela corta. Entre ellos el Premio de Novela Corta Salvador García Aguilar por su obra Hagan juegoy el Premio Internacional de Novela Corta La Esfera con La felicidad de la polilla.
La felicidad de la polilla es una novela escrita con una prosa irónica, con tintes de humor, que nos hace reflexionar sobre algo tan abstracto y poco tangible como es la felicidad.
Si quieres conocer un poco más a este escritor, aquí puedes leer un texto suyo:
LA LITERATURA O LA VIDA
Una mañana cualquiera de mi adolescencia abrí un libro de Octavio Paz y le oí decir que eso del amor era un invento tardío de la poesía cortesana, desconocido por completo fuera de la cultura occidental. A su juicio, el amor vivía en la Literatura y se alimentaba de personajes, en cambio las personas de carne y hueso se resignaban a compartir destinos más o menos penosos, mientras jugaban a Romeos y Julietas. En ese periodo tan febril y dogmático de la existencia, tan caro a las sutilezas y a los matices irónicos, mi sentencia fue inapelable. Octavio Paz era un intelectual decrépito, un cadáver exquisito, un senil roedor de biblioteca, además de un resentido, un solterón cenobita y un misógino gilipollas (probablemente entonces sólo me vino a la cabeza el último insulto). Tras el desahogo, decidí desterrarlo de mi biblioteca. Estaba clarísimo que ese infeliz jamás había dado su primer beso ni había pasado una madrugada en blanco pensando en ella ni había sentido el aleteo de las mariposas de azúcar revoloteando sobre su corazón. Obviamente ignoraba que la vida iba por delante de una Literatura cuya misión consistía en levantar acta notarial de un sentimiento universal y eterno.
Una tarde cualquiera, diez años después, abrí un libro de Kafka y le oí decir algo similar. Por aquel entonces el hombre demoraba su noviazgo con la sacrificada Felice Bauer sin atreverse a confesarle que no la amaba. Tan persuadido estaba de que las servidumbres del matrimonio le impedirían experimentar el sentimiento del amor, que finalmente la dejó. Poco después iniciaba una relación epistolar con otra mujer, Milena, y fue con ella, acaso porque se veía obligado a soñarla si quería verla, con quien descubrió lo que su prometida no supo mostrarle. La proximidad física banalizaba a Felice, en cambio, la distancia transformaba a Milena en diosa. Nos podemos imaginar a los novios, rutinarios, paseando por las calles de Praga después de almorzar, él, taciturno y apático, ella destilando un leve aroma a coliflor, explicándole que le dolían los pies con esos zapatos de aguja, que la verdura le hinchaba la barriga o que el salmón era su color predilecto para las cortinas de su futura alcoba, ¿te parece, cariño? Por fin, en la soledad de su cuarto, el novio se olvidaría de la novia para derramarse sobre la otra en apasionados mensajes de tinta: Ah, Milena, “Escribir cartas significa desnudarse ante los fantasmas, que lo esperan ávidamente. Los besos por escrito no llegan a su destino, se los beben por el camino los fantasmas.” Y luego liberaba su dolor por correspondencia: “No puedes amarme, por más que lo quieras; desdichadamente amas al amor que sientes hacía mí, pero el amor que sientes hacía mí no te ama.” Deslumbrado ante sus razones, comencé a matizar la postura de mi yo adolescente. El amor no era un invento de la Literatura, por supuesto, pero quizá ésta no se limitaba sólo a dar fe de su existencia. Quizá la persona experimentaba un amor tangible y su personaje se refugiaba en otro etéreo; de ese modo uno podía adentrarse en ambos mundos, carne y alma, recogiendo de uno lo que le faltaba del otro. Cerré ese libro, pero no lo desterré de mi biblioteca.
Una noche cualquiera, diez años después, (ya iban veinte) abrí un libro de Marina Tsvietáieva y le oí idéntico argumento. En sus conmovedoras cartas decía que el amor vivía en las palabras y moría en las acciones. La mujer estaba casada, tenía dos hijos, rutina marital, pero su personaje se había resarcido clandestinamente enamorándose de Rilke mediante una profunda y perfecta relación literaria. Por carta apretaba sus manos sin manos, lo besaba sin labios, porque ella no vivía en su boca, pues “cuando se ama a una persona se desea siempre que se vaya para poder soñarla”. A la tercera fue la vencida. Me convenció. Adiós resabios adolescentes. Estaba claro que el amor vivía en la Literatura, sí, y se desarrollaba en sus personajes. Entonces indulté a Octavio Paz y coloqué su libro junto al de Kafka y al de Marina, en mi mesilla de noche para que me iluminaran antes de dormirme.
No obstante, notaba como si se me escapara algo; una teoría demasiado redonda, demasiado sublime, demasiado aséptica. ¿De verdad la Literatura crea el sentimiento? ¿De verdad un verso vale más que una persona? ¿De verdad un beso soñado gana en perfección a uno regalado? Pues no estaba tan claro. Así que, antes de sancionar la tesis, escarbé un poco en sus biografías en busca de luz. Y la encontré, vaya si la encontré. Sorpresa. Resulta que además de escribir, los tres se reservaron un tiempo nada desdeñable para vivir esa vida tan banal que ridiculizaban en sus obras. Octavio Paz, antes de abandonar a su suerte a Helena Garro, despechado por su infidelidad con Adolfo Bioy Casares, perdió la cabeza por ella y reclamó entre lloros ese amor cuya existencia negaba, tan chulo, en sus versos. Entre carta y carta Kafka se desvivió y sufrió no por culpa de un sueño, sino por culpa de Felice, Yuly y Dora, las mujeres de pies encallecidos y barrigas hinchadas a las que recurría en sus momentos de angustia. El desgarro definitivo que condujo a Marina al suicidio no lo provocó su amor literario a Rilke, sino la condena a muerte de su marido y el encarcelamiento de su hija durante las purgas de Stalin. Y comprendí, que más allá de la Literatura, es la vida la que nos convierte en persona. El poeta, como decía Pessoa, sólo es un fingidor de penas y alegrías, un empleado a sueldo que trabaja a ratos puliendo y engastando palabras. Y cuando guarda el papel, sale a la calle y se pone a sentir con el peso de todas sus vísceras.
Hoy respeto a esos tres grandes escritores. Su Literatura está a la izquierda de mi cama. Me gusta hojearla, pero no cambio a ninguno por la mujer de carne y hueso que duerme a mi lado derecho. Ellos tampoco lo hubieran hecho, creo.
María Dolores Medio Estrada fue una maestra, periodista y escritora asturiana nacida en Oviedo en 1911.
Siendo muy joven se murió su padre y se arruinó la familia. Ante esta situación, Dolores se vio obligada a trabajar para pagar sus estudios.
Estudió Magisterio en la Escuela Normal de Oviedo donde obtuvo el título en 1930 con 18 años. Ejerció la docencia como maestra en la aldea de Piloñeta en Nava y otras escuelas rurales de Asturias desde 1934 a 1953. Fue expedientada y sancionada al terminar la guerra civil.
En 1945 obtuvo el Premio Concha Espina de cuentos.
Fue galardonada con el Premio Nadal en 1952 por su novela, Nosotros, los Rivero, inspirada en su ciudad natal.
La fama de este premio le permite abandonar la enseñanza trasladarse a Madrid y dedicarse a escribir y a lo que ella llama "la verdadera bohemia madrileña".
En 1963 encabezó en Madrid una manifestación de protesta dirigida al Ministerio de la Gobernación, en favor de los mineros asturianos.
Detenida e interrogada, fue multada con 25.000 pesetas, que no quiso o no pudo pagar.
Por esta causa pasó un mes en una celda común de la cárcel de Ventas en Madrid.
Dolores Medio está considerada como la escritora asturiana más importante de la posguerra. Pertenece a la Generación del 36 y se la incluye dentro de la tendencia de la literatura social que tuvo su auge en los años 50 y primera mitad de la década de los 60. Sus obras han sido traducidas al inglés, al alemán, al italiano y al ruso.
Su obra fue censurada, premiada y elogiada y con el paso de los años fue un tanto olvidada.
En 1981 la escritora crea la Fundación Dolores Medio a la que dona todas sus posesiones. En 1988 regresa a su ciudad natal donde fallece en 1996 a los 85 años. Es nombrada "Hija predilecta" de Oviedo y tiene la Medalla de Plata de Asturias. Su ciudad le ha dedicado una plaza con su busto y en la actualidad un Colegio Público y una Escuela de Educación infantil llevan su nombre.
NOSOTROS, LOS RIVERO
La nueva edición íntegra de Nosotros, los Rivero en la editorial Libros de la Letra Azul presenta el texto original del Archivo General de la Administración de Alcalá de Henares.
En este archivo se conserva la documentación de la censura durante la dictadura franquista. Antes de ganar el Nadal, Nosotros, los Rivero de Dolores Medio había sido considerada por la censura franquista como "Completamente reprobable".
Esta nueva edición recuperada en su texto íntegro está a cargo del profesor, filólogo y patrono de la Fundación Dolores Medio, Manuel Díaz-Faes. Esta edición íntegra lleva un prólogo de Ángeles Caso en el que se narra la historia de la obra y sus vicisitudes con la censura.
REBECA MENÉNDEZ
Esta cuidada edición de Nosotros, los Rivero ha sido ilustrada por la artista plástica Rebeca Menéndez nacida en Avilés en 1976.
Esta pintora y fotógrafa recrea con sus dibujos, con gran realismo pero con una gran delicadeza estética, el cerrado ambiente de la novela de Dolores Medio.
Rebeca Menéndez obtuvo una Beca AlNorte en el 2003 y posteriormente ganó otros premios como ArtNalón, el Certamen de Luarca y Arco 40 Häagen Dazs 2010, entre otros. Ha expuesto en numerosas ocasiones su obra individual y colectivamente.
Si quieres saber más sobre su obra, puedes ver este vídeo:
DOLORES MEDIO Y LO AUTOBIOGRÁFICO
"Yo he defendido siempre lo autobiográfico en la novela, porque, si bien encierra pocas dificultades para el autor, y por tanto resta mérito a su trabajo, valora en cambio a la novela como documento humano, dándole un sentido de autenticidad, de precisión indiscutible, que puede faltar en una obra puramente imaginativa."
OTRAS OBRAS DE DOLORES MEDIO
DIARIO DE UNA MAESTRA
Dolores Medio narra las primeras experiencias profesionales de la maestra Irene Gal en un pueblo asturiano y el desgaste de una relación amorosa sujeta a los trágicos avatares de la guerra civil y la postguerra.
Esta obra es un cruce entre la novela social, la novela sentimental y ficción autobiográfica,
CELDA COMÚN Es un relato autobiográfico y en el que la escritora asturiana cuenta su estancia en la cárcel por tras participar en una manifestación de solidaridad con la huelga de los mineros asturianos en 1962. La obra fue prohibida por la censura y publicada en 1996.
Otras obras suyas son: El milagro de la noche de Reyes, Compás de espera, Mañana, Funcionario público, El pez sigue flotando, Bibiana, Farsa de verano, El fabuloso imperio de Juan Sin Tierra, El señor García...
También tiene colecciones de cuentos y biografías.
LA FUNDACIÓN DOLORES MEDIO
En 1981, a los setenta años de edad, la escritora crea la Fundación Dolores Medio a la que dona todas sus posesiones.
En sus estatutos se indican los fines de su fundación:
"La creación y sostenimiento del premio de novela Príncipe de Asturias, y que velará por la pureza literaria y la honestidad profesional de los novelistas, teniendo además, como otros fines la creación de otros premios, la concesión de ayudas para estudios literarios, bolsas de viajes, promoción de actos de divulgación cultural y la distribución gratuita de libros y bibliotecas y otros centros de análoga naturaleza y la organización de cursos, seminarios y publicaciones".
La Fundación Dolores Medio convoca anualmente el Premio Principado de Asturias de novela.
El ultimo ganador del premio Asturias 2017, al que se presentaron más de 150 novelas, fue el historiador, periodista y filólogo ovetense Adolfo Casaprima Collera con la novela El inventor de sueños.
La fundación también patrocina el Premio Fin de Grado en Lengua Española y sus Literaturas “Dolores Medio”. Además la fundación convoca los Premios escolares de redacción Dolores Medio para alumnado de 6º de Primaria del concejo de Oviedo promovidos por el colegio que lleva su nombre y la propia fundación.
Para la realización de esta entrada, se han tomado datos, entre otros lugares, de la Fundación Dolores Medio, de la Revista de Literatura, 2012, julio-diciembre, vol. LXXIV y de los diarios: El País, Diario de León, La Nueva España y La Voz de Asturias. Dolores Medio, noveno premio "Nadal" 1952José María Martínez Cachero La proyección cuentística en Dolores MedioEun-Hee Kwon