CURIOSIDADES SOBRE FERNANDO PESSOA
EL ARCA DE PESSOA
Pessoa guardó en un arca innumerables páginas que, según un primer recuento, contenía 27,543 documentos.
En 1979 dichos papeles fueron adquiridos por la Fundación Gulbenkian que los entregó en 1982 a la Biblioteca Nacional de Lisboa.
De ellos sólo una parte han sido públicados.
Toda la actividad intelectual de Pessoa está reunida en dicha arca: notas de lectura, diarios, horóscopos y trabajos de astrología por la que sentía pasión, textos políticos, listas bibliográficas, correspondencia, poemas, canciones, prosas, obras de teatro, traducciones, en suma: un inventario exhaustivo que aún no termina de hacerse.
UNA FOTO DEDICADA
Esta fotografía (1929) sirvió para reiniciar un segundo período en la relación platónica de Fernando Pessoa con la joven Ophelia Queiroz.
Pessoa aparece bebiendo un vaso de vino tinto en la vinatería de Abel Ferreira da Fonseca, con unos pequeños toneles de Clarete, Abafado, Moscatel o Ginja detrás.
Ophelia contaba así la historia:
“Un día mi sobrino Carlos Queiroz trajo a casa la famosa fotografía de Fernando bebiendo vino.
Llevaba una dedicatoria: “Carlos, éste soy yo, en el bar de Abel, es decir cerca del Paraíso terrenal, por otra parte ya perdido, Fernando, 2/9/1929″.
Llevaba una dedicatoria: “Carlos, éste soy yo, en el bar de Abel, es decir cerca del Paraíso terrenal, por otra parte ya perdido, Fernando, 2/9/1929″.
Me pareció muy curiosa, desde luego – decía Ophelia -y le dije a mi sobrino que la quería para mí. Carlos se lo dijo y poco después me envió la misma foto con esta dedicatoria:
“Fernando Pessoa, en flagrante delitro”.
Le escribí para darle las gracias y me contestó“.
PESSOA Y KAFKA
Eran funcionarios de día y poetas de noche.
El redescubrimiento actual de Pessoa semeja al de Franz Kafka en los años cincuenta del siglo XX.
Ambos dejaron una vasta obra inédita que se conoció en forma póstuma.
Pessoa se transformó rápido en una referencia del Postmodernismo lo mismo que Kafka lo fue del Modernismo.
Kafka y Pessoa son verdaderos iconos de la cultura universal.
Desdoblarse siempre ha sido una forma de sortear la realidad amenazadora, una extraña forma de búsqueda de la verdad, una protección contra la muerte, el cautiverio o el poder que nos somete.
El funcionario poeta es el arquetipo de ese impulso al desdoblamiento, esa especie particular de necesidad de búsqueda de sí mismo del hombre en tiempos especialmente complejos.
Por eso Kafka y Pessoa aún ejercen en nosotros un raro atractivo
LA LISBOA DE PESSOA
Da un paseo por la Lisboa antigua de Pessoa con la compañía de la voz de Amália Rodrigues.
Me encantó tu columna
ResponderEliminarMuy amable. Gracias por el comentario. 8)
ResponderEliminarAcabo de descubrir este blog y me parece una mina inmensa por explorar. Lo que he visto sobre Kafka y Pessoa me ha parecido muy interesante.
ResponderEliminarGracias por su amable comentario. Es verdad, Kafka y Pessoa son tan especiales que cualquier tema que se trate sobre ellos resulta muy interesante.
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