Chrétien de Troyes en su estudio según un grabado de la BNF
CHRÉTIEN DE TROYES
Chrétien de Troyes es un escritor francés de finales del siglo XII (circa 1135-circa 1181).
Son muy escasos los datos biográficos que tenemos sobre este autor.
Es probable que naciera en la ciudad de Troyes, en la región de Champaña-Ardenas, pero ningún documento lo certifica.
Casas medievales en la ciudad de Troyes en en la región de Champaña-Ardenas
Chrétien de Troyes está considerado como la cumbre de las letras francesas de su tiempo y el precursor de la novela moderna.
Destaca por su habilidad narrativa y por su finura en el análisis psicológico de los personajes.
Se cree que fue un poeta o un trovador, autor de novelas en verso, de la corte de María de Champaña, la llamada princesa de los trovadores.
Letra capital con un supuesto retrato de María de Champaña
Chrétien de Troyes escribió sus obras por encargo y bajo el patrocinio de María de Champaña y de Felipe de Alsacia, conde de Flandes.
Miniatura de un banquete en una corte medieval
Chrétien es el primer novelista francés de nombre conocido, pues otras novelas anteriores a él son anónimas.
La obra de Chrétien de Troyes está compuesta en pareados de ocho sílabas.
Esta es la forma métrica que escogió para componer sus cinco grandes novelas.
Cuatro de sus novelas están acabadas:
Erec y Enid
Cligés
Yvain o El caballero del león
Lancelot o El caballero de la carreta
Dejó inacabada una quinta novela:
Perceval o El cuento del Grial
LANCELOT O EL CABALLERO DE LA CARRETA
Lancelot ou le Chevalier de la charrette es la tercera novela artúrica escrita por Chrétien de Troyes .
Se compuso entre 1176 y 1181 a petición de María, condesa de Champaña, hija de Leonor de Aquitania.
Esta novela en versos octosílabos es parte del Ciclo de Santo Grial, cuyos cuatro volúmenes se conservan en la Biblioteca Nacional de Francia bajo las signaturas FR 113 a FR 116.
Chrétien de Troyes iniciaría con El caballero de la carreta la glorificación de los valientes caballeros de la Tabla Redonda conformando en la materia artúrica un modelo literario procedente tanto del elemento fabuloso de raíces célticas como del universo cortés en el que el autor lo inscribe.
Los caballeros de la Tabla redonda y el Santo Grial
Lanzarote o el caballero de la carreta presenta similitudes en sus amores imposibles con la leyenda de los enamorados Tristán e Iseo.
La novela se inicia con la corte del rey Arturo reunida en la fiesta de la Ascensión.
El malvado Meleagant ha secuestrado y tiene prisionera a la reina Ginebra.
Lancelot, caballero del rey Arturo, se dispone a rescatar a la reina Ginebra de quien está enamorado.
Lancelot se arrodilla ante la reina Ginebra
Para alcanzar su meta de salvar a la reina, Lancelot tiene que superar una serie de pruebas y hacer sacrificios a lo largo de un viaje iniciático.
Una de las pruebas por la que tiene que pasar es la causa por la que se lo denomina caballero de la carreta.
Con el fin de salvar a su señora, Lancelot sube a una carreta para convictos conducida por un cuidador de ganado, signo de la mayor vergüenza social en la Edad Media para un caballero.
Así, pierde su honor y es condenado al ostracismo por el mismo código de caballería que le impone el sacrificio.
Esta novela es un buen ejemplo de fin'amor o fol'amor o el amor cortés, el modelo de amor por excelencia de la literatura medieval.
El beso de Lancelot y la reina Gineba en presencia de Galehaut
Chrétien de Troyes es el primero en mencionar dos elementos claves en la materia de Arturo: El Grial y los amores adúlteros de Lancelot y la reina Ginebra.
por Frederick William Burton,1864
INICIO DE EL CABALLERO DE LA CARRETA
Ya que mi señora de Champaña quiere que emprenda una narración novelesca, lo intentaré con mucho gusto; como quien es enteramente suyo para cuanto pueda hacer en este mundo. Sin que esto sea un pretexto de adulación. En verdad que algún otro podría hacerlo, quien quisiera halagarla, y decir así -y yo podría confirmarlo- que es la dama que aventaja a todas las de este tiempo; tanto como el céfiro sobrepasa a todos los vientos que soplan en mayo o en abril. ¡Por mi fe, que no soy yo el que desea adular a su dama! ¿Voy a decir: «Tantos carbunclos y jaspes vale un diamante como reinas vale la condesa?» No, en verdad. Nada de eso diré, por más que, a pesar de mi silencio, sea cierto. Sin embargo voy a decir simplemente que en esta obra actúan más sus requerimientos que mi talento y mi esfuerzo.
Empieza Chrétien su libro sobre El Caballero de la Carreta. Temática y sentido se los brinda y ofrece la condesa; y él cuida de exponerlos, que no pone otra cosa más que su trabajo y su atención.
Así que en una fiesta de la Ascensión había reunido el rey Arturo su corte, tan rica y hermosa como le gustaba, tan espléndida como a un rey convenía. Después de la comida quedóse el rey entre sus compañeros. En la sala había muchos nobles barones, y con ellos también estaba la reina. Además había, a lo que me parece, muchas damas bellas y corteses que hablaban con refinamiento la lengua francesa...
GODEFROI DE LEIGNI
Por causas que desconocemos Chrétien de Troyes no terminó su novela y el roman fue finalmente concluido por su discípulo Godofredo de Leigni.
Sir Gauvain D'Orcanie y el clérigo de El caballero de la carreta
La novela de El caballero de la carreta concluye con una explicación de la doble autoría de Chrétien de Troyes y de Godefroi de Leigni:
"Señores, si yo dijese más, sería fuera de materia. Por eso me dispongo a acabar: aquí termina mi relato.
Godefroi de Leigni, el clérigo, ha llegado al final de La Carreta. Nadie le reconvenga ni le reproche haber llevado su tarea más allá de Chrétien, pues ha obrado de acuerdo con él, que la comenzó. Su parte comprende desde que Lanzarote fue encerrado en la torre hasta el fin de la historia. Tal es su parte, ni más ni menos. De otro modo, saldría perjudicado el cuento."
Se suele considerar que Chrétien de Troyes escribió la obra por encargo de María de Champaña, cuya corte era un centro difusor de los valores del amor cortés, y que la condesa le habría impuesto el tema y el tono del relato.
El caballero de la carreta es una reivindicación del amor trágico frente a los valores del matrimonio y la caballería, es posible que Chrétien dejara la obra inconclusa por estar en desacuerdo con estas ideas, tan opuestas a las que había defendido en sus otras obras.
La dama del Santo Grial
por Dante Gabriel Rossetti, 1874.