06 junio 2014

JOHN BANVILLE, BENJAMIN BLACK, LA RUBIA DE OJOS NEGROS


JOHN BANVILLE, PREMIO PRÍNCIPE ASTURIAS DE LAS LETRAS 2014

John Banville es un escritor  irlandés nacido en Wexford, en 1945. 

Tras acabar su formación escolar comenzó a trabajar en la compañía aérea Aer Lingus. 

Entre 1968 y 1969 vivió en los Estados Unidos y a su regreso a Irlanda trabajó en el diario The Irish Press, hasta su desaparición en 1995. 


Ha trabajado como  subdirector y editor literario del periódico The Irish Times y es habitual colaborador de The New York Review of Books.

En 2011, John Banville recibió el prestigioso Premio Franz Kafka, considerado por muchos como la antesala del Premio Nobel.

Banville está considerado por algunos críticos como el heredero natural de Nabokov.
El estilo de Banville es reconocido por su prosa precisa y el uso del humor negro en boca de la persona del narrador.

El Jurado del Premio Príncipe de Asturias acordó conceder el Premio Príncipe de Asturias de las Letras 2014 "al novelista irlandés John Banville por su inteligente, honda y original creación novelesca, y a su otro yo, Benjamin Black, autor de turbadoras y críticas novelas policiacas."
El acta del jurado concluye diciendo: 
"La prosa de John Banville se abre a deslumbrantes espacios líricos a través de referencias culturales donde se revitalizan los mitos clásicos y la belleza va de la mano de la ironía. Al mismo tiempo, muestra un análisis intenso de complejos seres humanos que nos atrapan en su descenso a la oscuridad de la vileza o en su fraternidad existencial. Cada creación suya atrae y deleita por la maestría en el desarrollo de la trama y en el dominio de los registros y matices expresivos, y por su reflexión sobre los secretos del corazón humano."

BENJAMIN BLACK
Desde el año 2006 John Banville utiliza el pseudónimo de Benjamin Black para escribir novela negra.


La rubia de ojos negros es la última novela que ha firmado con su pseudónimo para novela negra, Benjamin Black. 


En esta novela Benjamin Black ha vuelto a dar vida al famoso detective Philip Marlowe de Raymond Chandler.


Le gusta decir que Black es un artesano y Banville un estilista: es sólo otra muestra de su humor. 

Banville y Black nos recuerdan por igual cuánta belleza, placer y emoción hay en la literatura.



LA RUBIA DE LOS OJOS NEGROS

Banville/Black pone su pluma al servicio del espíritu de Raymond Chandler por encargo de sus herederos.

En La rubia de los ojos negros resucita al legendario detective privado, Philip Marlowe, para embarcarlo en una nueva y peligrosa aventura en las calles de Bay City. 

La acción transcurre a principios de la década de los cincuenta. 
El negocio no anda bien y Marlowe se aburre, inquieto y solo  en su despacho cuando recibe la visita de Clare Cavendish, una millonaria joven y atractiva, elegante, rubia y de ojos negros.
Clare es la rica heredera de una gran firma de perfumes, pretende que Marlowe encuentre a un antiguo amante, un hombre llamado Nico Peterson. 
La mujer le encarga que busque a su amante, un hombre turbio, que ha desaparecido de la manera más extraña...

Black se transforma en Chandler pero no cae en el cliché, no llena el texto de tópicos, no lleva al personaje al exceso y se mantiene fiel en el retrato con altura literaria, frescura y estilo.  
Marlowe peles y recibe palizas de los malos de siempre, filosofa en la barra de un bar, juega al ajedrez en su triste casa de alquiler, bebe mucho, se mete en líos, desafía a la autoridad, lucha contra sus resacas y, por si todo ello fuera poco, se enamora de quien no debe.